La marca más querida por los colombianos es Chocoramo, un ponqué cubierto con chocolate. Lo consumen personas de todas las edades y de todos los niveles socioeconómicos del país. El dato lo respalda el estudio de marcas, Brand Asset Valuator. Detrás de este alimento está Productos Ramo, empresa familiar que tiene más de 70 años en el mercado y que hoy tiene en varios puestos gerenciales a miembros de la tercera generación de la familia Molano.
Juan Pablo Molano es uno de los nietos del fundador del negocio, Rafael Molano. Desde hace dos años, Juan Pablo asumió la gerencia de Innovación de la compañía. Su objetivo principal ha sido la renovación de la empresa y la creación de nuevos alimentos que se conviertan en referentes.
Molano instauró un modelo que ha permitido, no sólo la creación de nuevos productos, también ha favorecido las alianzas ganadoras con empresas como McDonald’s y Kellogg’s. En el último año, Ramo también comenzó a exportar su Chocoramo a Europa, Asia y Norteamérica.
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Molano comparte los retos en la compañía de su familia, el desarrollo de nuevos productos y la importancia de la innovación en la industria de alimentos.
¿Qué sigue para Productos Ramo, después de la exportación y las alianzas con otras marcas? ¿Qué planes de expansión tienen para este año?
Hemos visto que cuando se unen dos marcas ganadoras, la conexión con los consumidores es inmediata y eso es algo que queremos en Ramo. Al ser una empresa de tantos años en el mercado, muchos de los consumidores son adultos y queremos lograr una conexión con gente jóven. Esto lo hemos logrado con McDonald’s y Kellogg’s. Respecto a exportaciones, estamos llegando a mercados latinos en otros países y lo que haremos este año es explorar mercados cercanos a Colombia. Los colombianos son fieles a nuestra marca y los latinos apenas prueben los sabores de Ramo, se enamorarán.
¿Cómo fue el proceso de creación de nuevos productos que han sido tendencia en los últimos meses en Colombia, como el cereal de Chocoramo y McFlurry de Chocoramo?
Nos inventamos un proceso de gestión de innovación, basado en una metodología de “stage and gate”, en el que se deben cumplir procesos para que un producto nuevo sea realidad. Específicamente con el Mcflurry, sale de una inquietud de los presidentes de Ramo y McDonald’s Colombia para crear un helado juntos. Nos llaman, el proceso entra en este modelo y vamos midiendo cada etapa. Hicimos muchas pruebas de producto y el que ganó fue el del Mcflury de Chocoramo. Tuvimos un reto complicado para poder producir el tamaño perfecto de los trozos de ponqué en el helado porque no teníamos la manera de hacerlo en la planta, pero lo solucionamos y el resultado fue muy interesante. Normalmente este helado estaba planeado para venderse por tres meses, pero superamos todas las expectativas y el producto se quedó en la oferta de McDonald’s.
Respecto al cereal de Chocoramo el proceso fue similar. Llegó una solicitud de Kellogg’s, metimos la idea en este proceso de gestión de innovación y el resultado fue espectacular. Ellos producen el cereal, nosotros solo debemos enviar los sabores y las esencias. Ellos se encargan de un gran porcentaje de la distribución del cereal. Ha tenido una buena acogida por los consumidores y se ha vendido muy bien.
¿Hay posibilidad de nuevas alianzas con otras marcas?
Sí, nos hemos dado cuenta que estas alianzas son muy positivas para nosotros. Hemos tenido varias reuniones con otras compañías y seguramente lograremos lanzar nuevos productos que cautiven a nuestros consumidores y nos permitan llegar a ese público más joven que queremos. Este mes, por ejemplo, hicimos una alianza con HakimsPastry, sacando un nuevo producto de sandwich de helado con crispetas Ramo, el cual ya está en el mercado.
¿Cómo les ha ido con la exportación de Chocoramo?, ¿a cuántos países llegan y cuál es su volumen de exportación?
Estamos llegando a nueve países. Somos fuertes en Estados Unidos, específicamente en Florida y Texas. Abrimos mercado en un país relevante como México y en España tuvimos una gran acogida desde el inicio de este año llegamos allá y ha sido una sorpresa porque no nos damos abasto, la gente nos está pidiendo mucho, así que estamos trabajando para eso.
Desde la Gerencia de Innovación, ¿qué nuevos alimentos preparan para sorprender a los colombianos?
Tratamos de sorprender desde el core business, que es ponqués y snacks. Acabamos de lanzar en este mes de abril un ponqué nuevo, se llama Gala y es de banano chocolate. También una línea nueva de ponqué tradicional selecta, que son ponqués con nuevos sabores como frutos silvestres. Respecto a los snacks, también vienen novedades pero por ahora no puedo dar muchos detalles. Sin embargo, tenemos en mente el tema de lanzar nuevos productos saludables que es lo que está buscando la gente en el mercado, pero no puedo adelantar más detalles.
¿Cuáles han sido los mayores retos a los que se han enfrentado desde el área de innovación? ¿Tal vez el etiquetado?
Hay algo complicado a lo que nos enfrentamos seguido… pensamos en nuevos productos o nuevas ideas, pero no tenemos la tecnología en la fábrica para producir eso que se desea, así que nos enfrentamos al reto de buscar la manera de que eso sea posible. Entendimos que una buena manera es con alianzas, buscando alguien que tenga lo que nosotros no, con el objetivo de crecer en equipo. Por otro lado, buscamos generar una cultura de innovación en la compañía. Normalmente nos ven desde afuera como innovadores, pero hay procesos internos que no lo son, entonces ese es un reto grande. Pero creo que el reto más grande es estar constantemente sacando productos que sorprendan a los consumidores. Ramo tiene una vara alta y no podemos sacar cualquier cosa. Respecto a los sellos de etiquetado, ha sido un proceso difícil porque hemos tenido que reformular algunos productos para evitar los sellos y otros en los que aceptamos que estén los sellos porque no podemos negociar la esencia del producto.
En las más recientes ferias internacionales, ¿qué productos han llamado tu atención y por qué?
Los productos saludables bajos en azúcar, en grasa, en sodio, ya no son la tendencia, siento que eso pasó de moda. Ahora se piensa en alimentos funcionales que aporten algo al cuerpo. Productos que tengan ingredientes que ayuden a la digestión o proporcionen energía o ayuden a la visión. Eso me llama la atención porque acá seguimos pensando que lo saludable es lo último, pero no. También me llama la atención el auge de los productos a base de plantas, incluso hasta ponqués. Esa es una tendencia fuerte que tendremos que tener en cuenta. Aunque acá hay un punto clave y es que en el mundo estos productos son tendencia pero no son los que más se venden. Por eso en Ramo también somos indulgentes, queremos hacer alimentos que generen placer al comer y que se vendan. Finalmente, en estas ferias vimos el tema de cobrandings y la posibilidad de aliarnos con otras marcas para hacer productos ganadores.
¿Cuál fue la mayor enseñanza laboral de su abuelo y de su padre?
Una de las cosas que más le aprendí a mi abuelo fue el amor por Ramo. Aunque suene cliché, él siempre hizo las cosas con amor y le inculcó a los empleados de esta compañía el amor por Ramo. Eso me motiva a seguir ese legado y dejar que brille la huella de mi abuelo. Él decía que el chocoramo debía ser indulgente siempre, porque debemos llevarle alegría, placer y premio a las persona y esa es una gran enseñanza. Siempre buscamos lo que él inculcó en los productos: calidad, sabor y frescura, esa es la misión.
