¿Cuál era tu dulce favorito cuando eras niño? La nostalgia se apodera de cualquiera al recordar esos momentos en que el mundo era perfecto mientras hacíamos muecas con un polvito agridulce o nos deleitábamos con una paleta de caramelo.
La firma de investigación de consumo Kantar México publicó en abril de este año los dulces que para cada generación resultan únicos e irremplazables. El estudio divide las preferencias por décadas (los ochenta, los noventa y los dos mil) y las asocia con las generaciones X, Z y la millennial.
“Para la generación X, el Pulparindo es el más recordado y lo relaciona con un estado de felicidad”, señala Kantar. El top 5 para estos consumidores lo complementan Paletón, Selz Soda, Sugus y Pórtico (mejor conocido como Tico Tico). El Pulparindo también ocupa el primer lugar en los dulces recuerdos de los millennials, seguido de Chipileta, Miguelito, Cajita Sonrics y Tico Tico. En la lista de los centennials ya encontramos cambios significativos: Totis, BubbaLoo, Skwinkles, Lucas Muecas y Rebanaditas (paletas cubiertas de chile en forma de sandía).
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Cuando las transnacionales compran lo hecho en México
Durante el último par de décadas, la industria de la confitería en México, y específicamente la de los dulces, no ha dejado de evolucionar tanto en los gustos de los consumidores como en las marcas que se disputan su preferencia
La consultora BrandAsset Valuator (BAV) realizó en 2020 una investigación basada en cuatro métricas de valor e impulso de marca (diferenciación, relevancia, estima y familiaridad) para determinar quiénes dominan el mercado de los dulces en México.
Hoy podemos decir que el top 10 está conformado por Ferrero Rocher, Kinder Sorpresa, Kisses, Carlos V, Tutsi Pop, Pelón Pelo Rico, Dulces de la Rosa, Kinder, Sonrics y Paleta Payaso. Pero no todo es decepción para aquellos integrantes de la generación X que consideran que los de sus tiempos sí que eran dulces: el análisis de BAV también señala a las marcas que más crecieron en la década de 2010 a 2020 y aquí el primerísimo lugar es aún para Dulces de la Rosa. Después aparecen Lucas, Rockaleta, Skwinkles, Winis, Turín, Miguelito, Bon o Bon, Paletón y Pulparindo.
Es decir, las empresas nacidas en México aún compiten y se defienden del embate de las transnacionales, aunque cada vez son menos.
En 2004, por mencionar el caso que más les duele a muchos consumidores, The Hershey Company compró la empresa jalisciense Grupo Lorena, productora del famoso Pelón Pelo Rico. Otro ejemplo de estas transacciones que se han llevado a cabo en los últimos 20 años es la adquisición de Alimentos Matre, compañía regiomontana dueña de los dulces de tamarindo, por parte de la gigante estadounidense Mars (Skwinkles, M&M’s, Skittles, Snickers y Orbit) en 2001. Y que, por cierto, también compró a la chocolatera mexicana Turín en 2016.
Otro caso en que una multinacional vio potencial en una marca tradicional de dulces mexicanos fue cuando Grupo Bimbo adquirió a Dulces Vero, empresa que nació en 1952, y que muchos recordamos por sus paletas enchiladas con forma de mango y elote; esto aconteció en 2010.
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Tres marcas que siguen siendo orgullosamente mexicanas
A golpe de tradición y constancia, algunas empresas 100% mexicanas se han mantenido durante décadas en el gusto del público. He aquí tres de las más reconocidas:Dulces Anáhuac. Los creadores de Bocati, Selz Soda, Limón 7 y Burbu Soda nacieron en 1960, pero inicialmente era un negocio familiar de fabricación de gelatinas bajo la marca Toby. En los 70’s el negocio evolucionó hacia las golosinas y en 1977 lanzaron la primera paleta de caramelo con polvo de chile en el mercado, la famosa Chipileta. La empresa asegura que ha llevado sus productos a más de 35 países.
Dulces de la Rosa
Los famosos mazapanes de la Rosa tienen un sabor tan especial y hasta típico que durante décadas no ha existido un producto similar que le haga siquiera sombra. El renombrado mazapán que todos conocemos fue una elaboración casera que a partir de 1942 no ha dejado de recopilar adeptos en todo México. Hoy Dulces de la Rosa es una empresa que exporta sus dulces a Estados Unidos, Canadá, Centroamérica, Europa y Medio Oriente. Sí, de ellos también son el famoso Pulparindo y los bombones de chocolate que estás pensando.
Fábrica de Dulces Miguelito
El primer producto de esta empresa creada en 1970 fue en realidad una pulpa de chamoy. Hasta 1973 nació el polvito enchilado que todos conocemos. Hoy existen polvos Miguelito en 9 sabores, tamarindo, pepino-limón, mora azul, fresa, uva y tamarindo entre ellos. Su portafolio de productos, donde también se encuentran paletas enchiladas, llega a Estados Unidos, Guatemala y Canadá.
Miguelito resiste y sigue siendo un dulce 100% nacional
“Hemos tenido ofertas bastante importantes para adquirir la empresa y la marca, pero Miguelito es una empresa con valores familiares muy arraigados que no se plantea ese tipo de acuerdos por el momento”, comparte Eduardo González, gerente de Producción de la Fábrica de Dulces Miguelito.
Sin embargo, no todo puede ser tradición. Eduardo González admite que uno de los principales desafíos es conocer los gustos de las nuevas generaciones. “Estamos pensando en ellas. No nos quedamos cruzados de brazos pensando que Miguelito se vende sólo”, subraya Eduardo González.
Dulces Miguelito cuenta con un área de estrategia de mercado que observa las tendencias de sus consumidores. Sus análisis los llevaron a desarrollar Chamoyazo, su lanzamiento más reciente, un dulce líquido que puede utilizarse para aderezar frutas, botanas o verduras, y que también funciona para preparar micheladas. “Chamoyazo va enfocado a los paladares de los niños de hoy y en las formas de consumo de los adultos”, complementa González.
Esta diferenciación en sus fórmulas, considera González, es una de las claves para que los fabricantes de dulces mexicanos tradicionales se mantengan en un nicho especial. “Dulces Miguelito, en su tipo de producto, es el número uno a nivel nacional y a nivel mundial. He conocido muchos productos similares pero que no pueden igualarnos”, señala con orgullo el gerente de producción de la empresa.