El mundo cambió en un par de años. La llegada de la pandemia a causa del COVID-19, modificó los hábitos de compra. Ahora los consumidores demandan alimentos que no sólo ofrezcan vitaminas, minerales y proteínas; sino que además dejen atrás los ingredientes críticos en sus formulaciones. La era de los alimentos funcionales abre paso a un mercado millonario que podría llegar a los 218 mil millones de dólares en 2026.
Esto de acuerdo con cifras de la investigadora de mercado, Global Industry Analysts, en su estudio, “Alimentos y bebidas funcionales. Trayectoria y análisis del mercado global”, publicado en marzo pasado. Ahí se indica que ese tipo de comestibles son cada vez más demandados, sobre todo, para el consumo diario.
“Se espera un crecimiento acelerado de año tras año de alimentos y bebidas con proteína, probióticos, omegas, vitaminas y minerales. Ello como una respuesta para compensar las brechas nutricionales y mejorar la salud y bienestar”, se cita en el estudio.
Otro de los puntos rescatables de esta tendencia es la reducción en ingredientes críticos de las formulaciones de los alimentos y bebidas procesados, es decir, menos azúcares, sodio y grasa.
“Las bebidas ricas en proteína que promuevan la salud digestiva o que contengan antioxidantes representan otro impulso de crecimiento”, agregan en las conclusiones.
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Los alimentos y bebidas funcionales necesitan más proteína
Un ingrediente que es altamente demandado para adicionarlo a las formulaciones de alimentos y bebidas funcionales es la proteína de alta calidad. En esa gama de productos destaca ISO Chill 800, creada a base de suero premium y concentrada en polvo, que contiene 80% de proteína.
Su fabricante, Agropur, la ofrece en tres versiones: 8000, 8010 (con lecitina de soya para mayor solubilidad y dispersabilidad) y 8011 (con lecitina de girasol). Son de especial interés para el mercado de alimentos y bebidas funcionales, gracias a su alto valor nutricional y a sus características como la termo estabilidad, o su capacidad como emulsificante, gelificante y espumificante.
En qué alimentos y bebidas buscará el consumidor funcionalidad
Entre los mercados que se espera alcancen mayor potencial para los alimentos funcionales están: los destinados a bebés y niños, y las bebidas con ingredientes premium que incluyen múltiples beneficios para la salud. Es decir, combinan beneficios digestivos con vitaminas mejoradas, proteínas y antioxidantes.
Así puedes impulsar tu alimento o bebida
Para encontrar placer sin sacrificar la salud, los consumidores buscan opciones que eliminen azúcares añadidos. Por ejemplo esta formulación de café, en cualquiera de sus presentaciones y mezclas, es un excelente ejemplo, porque al estar enriquecido con proteína ISO Chill, tiene un extra que no afecta el sabor de la bebida y sí mejora la fórmula en su conjunto.
Del total de los ingredientes se puede mezclar un 46.40% de ISO Chill, 24.08% de leche en polvo, 11.56% de café, 4.80% de saborizante de chocolate blanco, 3.80% de saborizante de avellana, 2% de alulosa y .12% de Stevia. Todas las cantidades son aproximadas.
La proteína de suero concentrada: un ingrediente maravilla
Por sus características, la proteína de suero concentrada tiene una variedad de usos en la industria alimentaria, aquí los principales
| Uso en productos: | Función que aporta: |
| Ingrediente termoestable |
| Versiones instantáneas y no instantáneas con gran solubilidad |
| Proteína de alta calidad que fortifica las fórmulas |
| Emulsificante: favorece la mezcla de ingredientes. |
| Espumificante: reemplaza el huevo. |
| Gelificante: aporta consistencia. |
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