Entre las empresas que integran el sector de alimentos y bebidas, no todas necesitan una flotilla de camiones repartidores cero emisiones, agilizar hasta lo impensable sus procesos de almacenamiento y transporte o echar a andar una cadena en frío que se extienda decenas de miles de kilómetros. A veces los retos más complejos de logística requieren más ingenio y eficiencia que una inversión millonaria.
La logística puede definirse, de manera somera, como el movimiento eficiente de productos y servicios en beneficio del consumidor. Son todas aquellas acciones que mejoran la cadena de suministro. Las grandes empresas del sector justamente dominan estos procesos, y ello ha contribuido para posicionarse en el lugar en el que están.
Expertos en logística nos comparten algunas de estas estrategias que han beneficiado al sector y que puedes ocupar para adaptarlas a las necesidades de tu empresa.
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1. Haz un autoanálisis de logística
Francisco Giral, vicepresidente del Comité de Información de #SoyLogístico, asociación que agrupa a profesionales del sector, sugiere realizar primero el siguiente ejercicio. Se trata de un proceso que para las grandes corporaciones es fundamental a la hora de tomar mejores decisiones de negocio en materia de almacenamiento y transporte de mercancías: realizar un autodiagnóstico.
“Esto les ayudará a las pymes a identificar las áreas dónde tienen el cuello de botella, donde está el punto de dolor de sus clientes y a encontrar su propio camino para crecer”, comenta Francisco Giral.
El también director general de Netlogistik propone para este fin una herramienta gratuita creada por esta empresa con apoyo de la Secretaría de Economía: DNA Logístik, un diagnóstico público que permite hacer una evaluación general de la madurez que tiene una empresa en el tema logístico.
La página de DNA Logístik compartimenta la autoevaluación en las seis funciones logísticas que componen la cadena de suministro: 1) aprovisionamiento, 2) producción, 3) almacenaje, 4) transporte, 5) comercio internacional y 6) venta omnicanal. El sistema presentará un perfil logístico de tu empresa, qué tanto se debe corregir, mejores prácticas para hacerlo y, sobre todo, por dónde comenzar.
“No se trata de agobiar al empresario. La idea es que rescate dos o tres iniciativas y que comience con la que menos recursos requiere para ir tomando una condición de mejora todos los días”, recomienda Giral.
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2. Estandariza tus procesos, igual que las grandes empresas
Existen dos grandes razones para implementar la estandarización de procesos en una empresa de cualquier tamaño: el tiempo y el dinero. Y si de logística hablamos, los beneficios son aún más tangibles.
“La estandarización de procesos es una de las ventajas competitivas de las grandes empresas. Ellas tienen perfectamente definido cómo debe funcionar su cadena de suministro, y esa es una de las primeras grandes lecciones que debe aprender una pyme”, señala Gastón Cedillo, coordinador ejecutivo de la Asociación Mexicana de Logística y Cadena de Suministro, A.C. (AML).
Los gigantes del sector de alimentos y bebidas no sólo se dan cuenta de sus errores, los registran y estandarizan la solución para que cualquiera de los empleados involucrados en el tema pueda hacer uso de esas herramientas. Es decir, jamás tropiezan con la misma piedra.
Gastón Cedillo pone como ejemplo la flota de vehículos repartidores de Bimbo. “Los camioncitos están muy ad hoc a la operación de la empresa, son del tamaño adecuado para circular en zonas urbanas y cuando abren las puertas traseras para sacar el producto, estas tienen dos aditamentos: uno que fija la puerta para sacar las charolas con mayor facilidad y un plástico que se despliega para proteger a su vendedor y su producto del sol”.
Bimbo estudió paso a paso en qué podría mejorar sus procesos de entrega y estandarizó las soluciones para reducir costo y tiempo. Camiones más grandes implican, explica el coordinador ejecutivo de la AML, pérdida de combustible y de tiempo para buscar estacionamiento; un operador agobiado por el sol que hace decenas de entregas al día y que batalla todo el tiempo con la puerta, es un colaborador que no hará eficientemente su trabajo.
“Bimbo incluso tiene estandarizado el tiempo que deben tardar sus repartidores en surtir una tienda, pero eso no los hace fríos: dentro de ese proceso de entrega, tienen un cierto número de palabras y minutos para dar los buenos días y entablar una conversación cordial con quien está recibiendo la mercancía”, añade Cedillo.
Tal vez no suene tan impresionante, pero la estandarización de procesos es la base de la logística de las grandes empresas y las pymes deben implementarla, a su nivel, a la medida de sus necesidades.
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3. Digitaliza tus movimientos
“Si tuviera que dar una sola recomendación a las pymes, sería esa: digitalicen su logística, inviertan en tecnología”, sentencia el vicepresidente del Comité de Información de #SoyLogístico.
Francisco Giral explica que las innovaciones tecnológicas se han democratizado y que hay soluciones para todo los tamaños de empresa y en todas las aristas de la cadena de suministro, desde que el cliente hace el pedido hasta que se le entrega la mercancía.
El experto pone como ejemplo más evidente de esto a la automatización en la venta que puede hacerse a través de WhatsApp. “Ahí está una herramienta gratuita extraordinaria para digitalizar tu comunicación con tus clientes. Crea una página donde la gente entre, te pida los productos que necesita y te compre. Eso sí, no abras la cuenta en el teléfono de un empleado porque el día que se vaya, lo hará con todos los contactos de tus clientes”, recomienda.
Ya en 2019 Walmart de México y Centroamérica lanzó su servicio de entrega a domicilio vía WhatsApp y, hace unos meses, Coca-Cola anunció una estrategia de ventas a través de esta aplicación para sus mercados en México, Brasil y Colombia.
“Las grandes marcas se han dado cuenta que el consumidor final también se está digitalizando y es una respuesta a ello”, explica Giral.
Otra herramienta tecnológica gratuita que puede ayudar al proceso de entrega de mercancía son los mapas digitales. Los expertos consultados coinciden en que no es mala idea utilizar Waze o Google Maps para tener localizados a tus clientes más importantes y saber cuánto tiempo debes tardar en llevarles tu producto. Son soluciones simples, pero representan una buena forma de comenzar a cambiar el chip.
