Sólo 12 especies de plantas y cinco especies animales conforman tres cuartas partes de los alimentos que consumimos. Apenas tres alimentos (arroz, maíz y trigo) constituyen casi el 60% de las calorías provenientes de plantas en toda la dieta humana, de acuerdo a datos que proporciona el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Ese mismo organismo asegura que el sistema alimentario actual es el principal impulsor de la pérdida de biodiversidad. Por ello, tener otras opciones alimenticias ayudaría a que el sistema alimentario mundial sea más sustentable.
Para colaborar con la seguridad alimentaria de los 9 mil 700 millones de personas que vivirán en el planeta en 2050, el WWF desarrolló, con ayuda de expertos en sustentabilidad, agricultura, sabor y nutrición, el informe Los 50 Alimentos del Futuro. Se trata de opciones alimenticias que generan un menor impacto al medioambiente y además son altamente nutritivas.
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En orden alfabético porque en realidad todos son igual de valiosos, la nutrióloga Georgina Gómez, líder de nutrición para Unilever México y el Caribe, retoma el reporte de WWF y selecciona para Goula, su Top 10 de alimentos vegetales más completos y mexicanos (o con arraigo en su consumo en nuestro país).
Ajonjolí. Forma parte de las semillas oleaginosas, esto es, semillas que aportan grasa. “El ajonjolí contiene grasas saludables de las que tenemos que incrementar el consumo”, aconseja la experta. El ajonjolí también es una excelente alternativa para consumir proteína vegetal.
Amaranto. La calidad de proteína del amaranto es de las más altas entre los cereales. También aporta fibra y magnesio. El amaranto puede cultivarse en casi cualquier terreno sin necesidad de mucha agua.
Camote. Es una alternativa para diversificar los tradicionales alimentos ricos en carbohidratos, como la papá. “Su aporte nutrimental depende de su color, pero suelen ser ricos en potasio y también contiene los mencionados betacarotenos, precursores de la vitamina A”. El camote no requiere de mucho terreno para crecer.
Flor de Calabaza. Un ejemplo de cómo aprovechar todo el cultivo: no sólo comemos la calabaza, también nos deleitamos con su flor. Aprovechar todo siempre ayuda al cuidado del ambiente. Su color naranja intenso se lo dan los betacarotenos que son fuente de vitamina A. La flor de calabaza también es rica en vitamina C.
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Frijol. El rey de las leguminosas para los mexicanos. Los frijoles son ricos en proteína vegetal. “Además, contienen hierro, que es la deficiencia nutrimental más común en el mundo. Aunque los frijoles deben combinarse con alimentos ricos en vitamina C para aprovechar el hierro al máximo”, comenta la nutrióloga Gómez.
Germinados. De alfalfa y de garbanzo, por ejemplo. “Aunque no son tan comunes en la cocina mexicana, me parece importante ponerlos sobre la mesa porque más del 90% del contenido de los germinados es agua”, dice Gómez. El proceso de germinación duplica y en algunos casos triplica el valor nutritivo de estos brotes. Los germinados de garbanzo aportan calcio, magnesio y zinc, por ejemplo.
Hojas verdes. Espinacas, berros, quelites… “Una de las recomendaciones dietéticas que siempre le doy a las personas es que todos los días consuman una de estas hojas verdes, de aquí al resto de sus vidas”, comparte la nutrióloga. Georgina explica que estos vegetales son los que menos calorías aportan a la dieta: dos tazas y media de espinaca equivalen a unas 20 calorías, por ejemplo. Las espinacas son ricas en hierro y en vitaminas A, C, B y K. Por si faltara algo, el crecimiento de las hojas verdes es casi espontáneo.
Jícama. Una más de las verduras que México dio al mundo. Su producción es de alto rendimiento, es decir, puede crecer y ser cultivada muchas veces sin agotar los recursos naturales que la rodean. Además, promueve la fertilidad de la tierra. La jícama es generosa en vitamina C.
Linaza. Es uno de los alimentos vegetales con más contenido de ácidos grasos omega 3, los nutrientes que ayudan a la buena salud del corazón. “La linaza está al alcance de todos los mexicanos y podemos incrementar su consumo si la incluimos en licuados y cocteles de frutas”, expresa la nutrióloga Georgina Gómez.
Nopal.La estructura del nopal es básicamente fibra y agua, así que su aporte calórico es mínimo. Esta verdura es resistente a las sequías, factor que lo convierte en uno de los cultivos más sustentables. Un tip de Georgina Gómez: cuando hierves los nopales, en la baba que queda en el agua, se va buena parte de la fibra. Mejor consume tus nopales asados o al vapor.
Conoce los 50 alimentos del futuro aquí.
