El último mes del año está marcado por las festividades que generan altas expectativas de ingresos. En ese contexto, el panorama en el sector de bebidas y alimentos es, para algunos esperanzador, y para otros un reto de supervivencia. Aquí te compartimos cuáles son los alimentos y bebidas que más ventas esperan y los que probablemente se queden en los anaqueles.
La firma Raddar, analista de consumo en Colombia, pronostica una desaceleración general en el consumo de los hogares del país, como ocurrió en 2022, cuando se presentó una caída del 13% en el gasto, que impactó especialmente en el sector de bebidas y alimentos. Hubo alza de precios, menos productos en oferta y altas tasas de interés.
Una radiografía similar se proyecta para el término de 2023. Esta temporada hay que sumarle nuevos factores como el impuesto saludable, la inflación y la desaceleración de la economía colombiana, que en el último trimestre se contrajo un 0,3% en su PIB.
Según Camilo Herrera, presidente de Raddar, el índice “Gastometría” realizado por su firma indica que el gasto real de los hogares durante el 2023 continúo disminuyendo y el perfil de los compradores se ha centrado en cazadores de precios bajos.
“A octubre, el gasto real en alimentos y bebidas ha caído un 4,4%, porque si bien se invierte más dinero, se adquieren menos productos. Esto no ocurrió en años anteriores y lo que está pasando cuenta de cobro hoy es que en 2021 hubo una anticipación al gasto producto de la pandemia”, explica Herrera.
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Estos alimentos peligran en el consumo decembrino en Colombia
El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), estima que en lo corrido del año se ha presentado un alza de 11% en los precios de alimentos y bebidas. Este año, los productos que más han presentado un alza son tomate con 68%, dulces, confites y caramelos con 28%, la mantequilla de vaca, las legumbres y las hortalizas en conservas han subido 26% muy cerca de los alimentos precocidos con 25%.
A ello se suma el impuesto saludable, que será del 10% sobre el precio final de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas. Por esa razón, se pronostica que los productos que tendrán un mayor desafío en diciembre serán gaseosas, jugos procesados, ponqués, galletas, chocolates y dulces.
La firma consultora Ventus explica que en diciembre estos productos podrían presentar una reducción de ventas de cerca del 3%, por lo que deben buscar mecanismos de ventas en mayores cantidades o promociones que amortigüen la situación.
“Es una realidad que los productores, vendedores e importadores se verán obligados a incrementar costos asociados al impuesto, porque se disminuirá su rentabilidad y buscarán equilibrar el alza trasladado el valor al consumidor. El gran reto es no desincentivar el consumo”, explica Sara Valbuena, analista de Ventus.
Vino, bebida ganadora en Colombia de las fiestas decembrinas
Este diciembre, el gasto en bebidas alcohólicas importadas será un lujo y los colombianos están buscando disminuir el impacto en sus bolsillos. “Lo que sucederá es que los consumidores prefieran tragos de menor valor como cerveza, aguardiente o vinos”, señala Herrera.
En este entorno, uno de los sectores con mayores retos será el de destilados importados, debido al aumento del dólar. Marcas de whisky, ron, brandy, vodka, ginebra, coñac y tequila tuvieron un alza del 10% en lo que va del año.
A pesar de esta situación, algunos productos de bebidas y alimentos han encontrado una ventana de oportunidad. Es el caso de los vinos, Dislicores, la principal importadora del país, confirma que el sector vende el 30% de su inventario en diciembre, cifra cercana a los 100 millones de dólares.
“De los 38 millones de litros de vino que se consumen en el país, cerca de 13 millones se venden entre noviembre y diciembre. Para esta época, la participación del vino en el mercado de bebidas alcohólicas pasa del 13 al 60%, posicionándose por debajo de las cervezas, según datos de Nielsen”, explica Luis Valencia, director de eventos especiales de Dislicores.
De esta forma, el vino es uno de los productos ganadores para diciembre, al ser uno de los licores preferidos –y más económicos– para celebrar en fechas especiales.
El queso tipo holandés se posiciona como un producto de temporada navideña
A pesar de que ha sido un año complejo para los lácteos en el país por la fluctuación de precios, diciembre es una época esperada para los quesos madurados, principalmente para el queso tipo holandés, que se vende hasta cinco veces más que el resto del año. Este alimento que se produce en Colombia, representa el 50% de las ventas de quesos madurados en el país.
Las empresas líderes del sector de lácteos Alpina, Colanta y Colácteos, que producen cerca de 800 toneladas de ese queso al año, indican que en esta temporada se comercializa hasta el 45% de su inventario.
La razón es que el queso tipo holandés es parte de los productos tradicionales y de las cenas navideñas y de fin de año. Asimismo, se ha utilizado como un alimento para regalar junto a una botella de vino, por lo que cerca de 400 toneladas se venden en esta época.
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Lechona, plato típico que impulsa la venta de cerdo en la temporada decembrina
El tercer ganador de la temporada navideña es el cerdo, pero no por la venta directa de la carne del producto sino por la lechona, un plato típico colombiano a base de cerdo, verduras y arroz.
En diciembre de 2022, las lechonerías vendieron tres veces más que en 2021, pues los precios de las carnes frías y otras proteínas fueron más caros.
“En diciembre no damos abasto porque las ventas se nos triplican. Tenemos que prepararnos con anticipación para manejar los costos y poder ofrecer buenos precios”, explica Patricia Rodríguez, propietaria de la lechonería Capitán Lechón.
Para 2023 se estima que la venta de lechonas pueda crecer hasta cinco veces, teniendo en cuenta que el cerdo es la proteína que menos ha subido de precio en 2023, su alza es de 2%, contra el 7% del pollo y 3% de la carne de res.
Según el Dane, en 2022 el consumo per cápita de cerdo fue de 13,2 kilos, para 2023 se proyecta que crezca a 20 kilos, pues es la proteína que menos impacta el bolsillo de las familias colombianas.
La lechona también tiene una ventaja en relación de precio y cantidad. Un cojín (cerdo entero) de lechona, del cual se sacan entre 80 y 100 porciones, puede costar entre 400 y 600 mil pesos*, alrededor de 6 mil pesos por persona.
El gran reto es que el sector porcicultor pueda responder a la demanda que desde octubre empiezan a gestionar sus pedidos. Según Porkcolombia, el gremio de productores de cerdo en el país, hoy se tiene tal capacidad porque en noviembre y diciembre se vende la cuarta parte de la producción anual.
Si bien hay un contexto de desaceleración económica en Colombia, diciembre continúa siendo una época que dinamiza el mercado e incrementa el gasto de los hogares. La elección de los productos a consumir dependerá de la capacidad de ingresos, por lo que la innovación y estrategias de marketing juegan un papel crucial en el éxito durante la temporada navideña.