Para estabilizar el precio del maíz y no afectar a alimentos como la tortilla, el gobierno de México anunció que aplicará un impuesto del 50% a las exportaciones de maíz blanco harinero para consumo humano.
Lo hizo con un decreto publicado ayer y que modificó la Tarifa de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación. La aplicación del impuesto inició hoy y se ampliará hasta el 30 de junio de 2023.
“Para garantizar un abasto suficiente es necesario mantener la producción nacional en nuestro país y asegurar condiciones de mercado que permitan estabilizar su precio”, asegura el decreto.
Después de conocer la publicación, el Consejo Nacional de la Tortilla informó en un comunicado que la medida no necesariamente reducirá el precio de venta de la tortilla.
“Que el producto se mantenga en territorio nacional no garantiza la regulación del costo, ya que se corre el riesgo de que las harineras y comercializadoras del país acaparen el producto y controlen el precio del insumo”, afirman en un comunicado.
Además, especifican que en el precio de la tortilla no solo influye la materia prima que en este caso es el maíz, también impactan los precios elevados de todos los demás insumos que se han incrementado gracias a la inflación y al contexto económico.
Con un 89% de participación en la producción nacional de granos, el maíz es el grano de mayor producción nacional. Tiene un consumo anual per cápita de 332 kilogramos.
