Cuando José Medina decidió tocar las puertas de Grupo Bimbo para ofrecer su producto. Se burlaron de él. En ese momento, Deiman, su empresa dedicada a la producción de sabores, no tenía ninguna certificación. Sin embargo, Lorenzo Servitje, quien encabezaba la panificadora, dio la orden de apoyarlo por tratarse de una empresa mexicana.
Con ese apoyo, patrocinaron sus primeros cursos de manufactura y producción, y mejoraron sus operaciones. Ello allanó el camino y les abrió paso. Deiman tiene hoy una planta en la Ciudad de México, en la que laboran 350 empleados y 4 mil distribuidores a nivel nacional e internacional. También están presentes en más de 30 mil paleterías y neverías, 27 mil panaderías y 70 mil cafeterías a nivel nacional; además de otros establecimientos.
La división dedicada al desarrollo de sabores y colores a nivel global, bajo el nombre Etadar by Deiman, ha sido merecedora de distintas certificaciones que garantizan inocuidad, salud y calidad. Incluso poseen certificado Kosher.
Una de las claves para consolidar su empresa está en la fusión de las culturas gastronómicas europeas y asiáticas que tiene México. Medina asegura que todo ello representa un crisol de técnicas, cultivos, especias y conservación de alimentos. Todo un mundo de sabor.
Etadar by Deiman tiene dos pilares fundamentales, el desarrollo de sabores mexicanos como mamey, zapote, granada y nanche; y el talento de sus empleados, Juan Thuemme, es el experto saborista, quien encabeza las investigaciones que hace la empresa.
En el área de las opciones saladas han innovado con chiles mexicanos, ofrecen polvos saborizados con morita, cascabel, guajillo, puya o chiltepín; mismos que forman parte de su colección de chiles mexicanos que fue lanzada al mercado en octubre.
La empresa también tiene presencia en Estados Unidos, desde hace 12 años. Medina explica que los inmigrantes mexicanos se identifican con los sabores y aromas que evocan a la familia, les provocan nostalgia. Por esta razón, los sabores más vendidos en ese mercado son, vainilla, nuez, limón, coco, grosella y fresa.
Sintonía: Nuevas tendencias de aromas y sabores para el 2020
Como experto en sabores, Medina Flores adelanta que las tendencias a nivel global para el año entrante son esencias florales, entre las que se incluyen jengibre, bergamota y flores de cerezo.
“Nuestra aportación para el próximo 2020 es un portafolio que se llama Sintonía, son maridajes químicos que estimulan el gusto”, comparte.
Eduardo Molina, director comercial de Etadar agrega que llegaron a esa conclusión después de una investigación sobre lo que está en boga. Gracias a los hallazgos obtenidos, la nueva colección que ofrece la empresa contiene 24 perfiles en los que fusionan flores y especias. Jazmín, geranio y flor de naranjo, se suman a pimienta rosa, cardamomo, cúrcuma o jengibre.
“Vemos que hay combinaciones como el wasabi en bebidas de té, que dan un picor extraño, pero que resulta atractivo”, señala el directivo.
La crisis de la que nació Deiman
La historia de Deiman está íntimamente ligada a la familia de José Medina. La empresa se fundó en 1938. A lo largo de ocho décadas, la fabricación y comercialización de colorantes, saborizantes y productos semipreparados para la industria de alimentos, ha sido su negocio.
José recuerda que debajo de la casa de sus abuelos estaba la fábrica. Sus visitas familiares estuvieron acompañadas de los aromas que se colaban por el aire. Sus recuerdos huelen a vainilla, chocolate, grosella o lo que se estuviera preparando. Sin saberlo fue ahí donde se entregó al mundo de los sabores.
Estudió Derecho, con especialidad en laboral y realizó estudios en Estados Unidos y Reino Unido. Por ello, sus familiares le pidieron que interviniera en las cuestiones legales de la empresa. Durante las revisiones se percató que la fábrica estaba en recesión. Malas prácticas de producción, pésimos manejos administrativos y un ventajoso contrato sindical ocasionaron un caos. Medina se dedicó a negociar con la central obrera y reventó la huelga.
“Ese día despedí a 40 empleados. En una situación de crisis, vi la oportunidad de darle a la empresa un giro, un nuevo impulso y comprometerme con ella”, recuerda.
Desde 2005, José Medina Flores lidera la empresa. Pertenece a la tercera generación al mando. Lo mejor es que lo compagina con otra de sus pasiones, la abogacía. Es socio del despacho Ortiz, Tenorio y Medina, S.C.
“Mi aspiración es llegar a los 100 años con Deiman”, dice con orgullo José Medina. La realidad es que no está tan lejos.
