El cierre de año se espera, por decir lo menos, poco dinámico para el sector. Varias empresas ya han anunciado alza de precios: Coca-Cola realizó este mes el tercer incremento del año, de alrededor de 1 a 3 pesos por producto. Heineken anunció alza de entre 15 y 20% para el año entrante.
Según estimaciones de la consultora Nielsen, se prevé que 2022 cierre con un alza mínima en el consumo de alrededor del 3%. Sin embargo, tres factores seguirán pesando: el alza en materias primas, la inflación y el menor poder adquisitivo de los consumidores. Para el año entrante, la tendencia continuará.
Analistas coinciden en que se espera un 2023 con preferencia por las marcas propias, la necesidad de aprovechar promociones y la búsqueda de precios bajos. Actualmente, seis de cada 10 compras están influidas por el precio.
Entre las categorías más castigadas, según Nielsen, están leche evaporada, condensada, yogur, condimentos y untables como mermeladas. Pero se espera una leve mejora en bebidas, confitería y comida ligada a la indulgencia.