La Organización de Naciones Unidas (ONU) dio a conocer que en América Latina y el Caribe, el 41% de la población enfrenta inseguridad alimentaria; mientras que el sobrepeso y la obesidad avanzan de forma alarmante.
En 2020, alrededor de 59.7 millones de personas sufrieron hambre, de acuerdo con el documento “Panorama Regional de Seguridad Alimentaria y Nutricional 2021”. Ello significa un aumento de nueve puntos porcentuales respecto del año anterior, además es el incremento más pronunciado del mundo a nivel regional.
Como casos de inseguridad alimentaria grave se considera a las personas que se quedan sin alimentos o pasan un día o más sin comer, que en 2020 se calcularon en 92.8 millones de personas, pero en 2014 eran casi la mitad, 47.6 millones de personas.
La inseguridad alimentaria avanzó de 6.4 en 2019 a 9.6 en 2020. Una de las principales causas del alza de cifras es reflejo del impacto por COVID-19, pues el poder adquisitivo de millones de personas se redujo. Lo preocupante es que en la región ya son seis años consecutivos que se registran incrementos.
