Para difundir las mejores prácticas de la industria, impulsar a los medianos y pequeños productores y promover la investigación científica y tecnológica, se creó el Instituto Mexicano de Porcicultura (IMP). Está apoyado tanto por la Organización de Porcicultores Mexicanos (Opormex), como por las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural y la de Economía.
El nuevo organismo es fundamental para promover una mayor estandarización de las normas sanitarias y las buenas prácticas pecuarias, en beneficio directo de los consumidores nacionales e internacionales.
Opormex aglutina a más del 90% de los productores organizados del país, que operan con técnicas de clase mundial, lo que posibilitará acercar el conocimiento a los sectores productivos menos favorecidos.
La actividad porcícola es una de las principales dentro de la estructura económica nacional y, debido a su aporte al valor agregado del sector agropecuario y la utilización eficiente de los recursos destinados a la ganadería, es una ejecución altamente dinámica y que contribuye significativamente al Producto Interno Bruto (PIB) de alimentos y productos básicos del país.
El presidente de Opormex, Heriberto Hernández Cárdenas, anunció que ofrecerán asesorías y capacitaciones y acercarán la innovación tecnológica a los productores que operan con procesos tradicionales.
Destacó que con el fin de reducir el costo de estos procesos tecnológicos para los pequeños y medianos porcicultores, el instituto servirá como validador y generador de modelos estándar, lo que les permitirá tener herramientas necesarias para competir de mejor manera en el mercado nacional e incursionar en los internacionales.