Nutrición Consciente
Reconoce a productos, iniciativas o negocios que tengan un impacto positivo en la salud, bienestar y nutrición de la población a partir de la mejora de la oferta, calidad y comunicación de productos alimenticios a la cual pueden acceder.
Mejor Alimento Funcional, Nutracéutico o Foshu
Ganador: Granaria
Cada vaso de 250 mililitros de esta bebida vegana contiene más de 450 millones de unidades formadoras de colonias de lactobacillus acidophilus. Granaria está certificada ante el Global Food Initiative, que asegura la inocuidad y rastreabilidad de todos sus ingredientes.
Mejor Producto Alimenticio con Nivel de Procesamiento Mínimo
Ganador: Früvethy
Elaboran snacks, tisanas, harinas y polvos de frutas y verduras liofilizadas. Früvethy colabora con agroproductores de Oaxaca, que cultivan con prácticas agroecológicas todos sus alimentos, ofreciéndoles comercio justo y directo.
Mejor Producto Alimenticio Procesado
Ganador: Hellmann’s Liviana de Unilever
Con tan solo 18 kilocalorías por porción, tiene un contenido de aceite más bajo que el estándar del mercado. Ayuda a sustituir el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas por otros ricos en grasas insaturadas, que son más saludables.
Mejor Producto de Nutrición Infantil
Ganador: Kiikter
Un gel comestible fortificado con el 100% de la Ingesta Diaria Recomendada de hierro, ácido fólico y vitaminas B12 y C que aporta una combinación de micronutrientes en la dosis y estructura química que maximizan su biodisponibilidad. Fue diseñado para reducir el riesgo de anemia y mejorar la nutrición de niños con inseguridad alimentaria. Su textura semilíquida permite una fácil deglución y absorción. Se consume del envase reciclable sin preparación previa. Su vida de anaquel es de 14 meses sin refrigeración. Su etiquetado no contiene sellos ni leyendas precautorias. Además de sus beneficios, ofrece un agradable sabor a fresa en un empaque que facilita su transporte, almacenamiento y consumo.
Mejor Producto Alimenticio Procesado
Gran Premio ’Semilla de Consciencia’: Frijoles La Costeña
Este año, por tercera vez consecutiva, nos volvió a impresionar un proyecto impecable que demuestra el poder de la simplicidad a la hora de crear productos nutritivos, accesibles y saludables. Con esa evidencia, encontramos que era necesario crear un reconocimiento especial a esas marcas que ya ganaron en nuestras dos primeras ediciones y que en esta tercera edición siguen sembrando la Consciencia Alimentaria en México. En otras palabras, aquí queremos dar un premio a la consistencia en la excelencia.
Sólo cuando se tienen proyectos de largo alcance, que año con año crecen no sólo financieramente, sino en el alcance de sus beneficios al medio ambiente y a las personas, es que podemos hablar de una consciencia alimentaria que sí tendrá un cambio profundo en el planeta.
Se trata de un producto que ha ganado desde la primera edición como Mejor Producto Alimenticio Procesado. Por ello se le reconoce con el Gran Premio ’Semilla de Consciencia’. Los frijoles La Costeña se recolectan en Querétaro, Veracruz y Zacatecas. El impacto positivo de un producto tan nutritivo —son naturalmente ricos en hierro—, tan tradicional y tan accesible para el consumidor, tanto en precio como en disponibilidad en puntos de venta, es incalculable en el bienestar alimentario de millones de mexicanos.
Concepto Restaurantero con Mejor NutriciónMención Honorífica: Pizsana
En este reconocimiento solo tuvimos un participante. De acuerdo a las reglas del concurso, no se le podría declarar ganador a ese único participante y el reconocimiento se declara desierto. Sin embargo, siguiendo el espíritu de los Premios Goula, que es impulsar a estos proyectos que lo están haciendo bien, no podemos dejar de mencionar y reconocer con una Mención Especial a ese único participante de la categoría pues es un gran proyecto.
Pizsana son pizzas personalizables con ingredientes naturales. Sus menús fueron desarrollados por nutriólogos para balancear los diferentes grupos alimenticios. Están certificadas para dietas keto y sus menús tienen la información nutrimental visible a sus comensales. Son bajas en carbohidratos, sin grasas añadidas ni azúcares, conservadores, saborizantes o almidones. Tienen entre 70 y 90 por ciento menos calorías que otras pizzas regulares.