Detrás de Brasil, México es el segundo país latinoamericano que más toma en cuenta las recomendaciones de los influencers antes de comprar un producto. De acuerdo con la encuesta de Statista, 30% de los mexicanos dijeron que han adquirido un producto porque vieron a un influencer que lo promovió. Por su parte, el 44% de los brasileños se ven influenciados por los creadores de contenido. En contraste, Colombia y Chile son los países que menos atención prestan a esas recomendaciones, con el 16 y 13% de penetración respectivamente.
Julieta Vargas, senior business developer en la agencia DC Influencer Marketing dijo que el interés en las recomendaciones de los influencers obedece a que en México, los usuarios se pasan más horas navegando en las diversas redes sociales y por eso son un recurso para las marcas que los contratan.
“Gran parte de las marcas han optado por manejar muchos de sus presupuestos alrededor del influencer marketing”, afirmó Vargas al periódico Reforma.
La especialista señala que los microinfluencers son más cercanos a las personas respecto al tema que abordan, y son percibidos como “alcanzables” pues crean una conexión más natural. En el otro extremo, los creadores que tienen más de 100 mil seguidores —los macroinfluencers— promueven productos más aspiracionales.