Al considerar que la política energética del actual gobierno federal viola el acuerdo al que se comprometió el gobierno mexicano en el T-MEC, Estados Unidos y Canadá presentaron solicitudes formales de consulta sobre la Ley de la Industria Eléctrica.
Ambas naciones señalan que México beneficia la operación de la Comisión Federal de Electricidad y Pemex; mientras perjudica a sus empresas del sector energético.
La molestia de nuestros socios comerciales se debería dirimir cuanto antes porque después de los 75 días de consulta entraría el panel de controversias y si México lo pierde se prevén represalias contra las exportaciones mexicanas. Éstas podrían consistir en aranceles a las exportaciones nacionales, que van desde el sector automotriz hasta el manufacturero, y desde luego el de agroalimentos. Con ello, el costo sería para toda la economía del país y, por si fuera poco, desalentaría la inversión.
Además de analistas financieros, organizaciones como la Confederación de Cámaras Industriales, la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación y el Instituto Mexicano para la Competitividad, ya alertaron sobre ello.