Improvisación, necesidad de tener un retorno rápido y apertura acelerada de puntos de venta, fueron las circunstancias que llevaron a Buffalo Wings (BW) al borde de la quiebra en Colombia. El restaurante dedicado a la venta de alitas enfrenta deudas por más de 20 mil millones de pesos*.
El presidente de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica (Acodres), Guillermo Gómez, explicó que esta situación ha sido común para muchos restaurantes del país en los últimos meses.
BW es una franquicia salvadoreña que llegó a Colombia en 2009, tiene 27 puntos de venta en todo el país y no atendió a tiempo las alertas inflacionarias.
La empresa fue aceptada en el proceso de reorganización en los primeros días de septiembre, pero en los siguientes 90 días incumplió con sus acreedores y ahora tendrá que esperar la decisión de SuperSociedades, para saber si les permiten o no ampliar los plazos de pago.
Para los especialistas, BW debió actuar a tiempo. Por ejemplo, no cerró las sucursales que no resultaron estratégicas, incurrió en gastos innecesarios como remodelaciones de algunos locales e incluso hizo lanzamiento de nuevos puntos de venta en lugares en los que su negocio no funcionó. Todo esto generó pérdidas significativas. Además no cumplieron con el acuerdo con SuperSociedades.
*Todas las cantidades en pesos en este texto se refieren a pesos colombianos.