Cada año, en el país se desperdician más del 35% de alimentos. Lo que implica un costo de 2.5% del PIB nacional, por ello, diversas organizaciones y empresas del sector de alimentos y bebidas se unen en la iniciativa Pacto por la Comida, con la que buscan reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos en 50% en 2030.
Entre los objetivos de la estrategia, también está la recuperación y redistribución de alimentos para combatir el hambre. El Banco de México identificó que hay 25 millones de personas que no alcanzan la seguridad alimentaria y 8 millones que sufren hambre crónica en el país.
Encabezan la iniciativa, la Red de Bancos de Alimentos de México y Waste Resource Action Program (WRAP), programa inscrito en los objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Además, se suman empresas agrupadas en ConMéxico como Grupo Bimbo, Kellogg’s, Fundación Lala, Fundación Walmart México, Nestlé México, The Consumer Goods Forum – Latam, Trendsétera, Unilever y WWF México.
“Hacemos un llamado a las empresas mexicanas a sumarse a combatir la pérdida y el desperdicio de alimentos. Sabemos que muchas organizaciones han hecho ya mejoras de eficiencia en sus procesos, sin embargo, los desafíos mayores, es decir, los que abarquen al total de la cadena de producción, siguen sin ser atendidos por todos los que participan en ella, desde productores hasta consumidores”, dijo María Teresa García, directora general de Banco de Alimentos de México.
El Pacto por la Comida trabajará en el marco de los objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para impulsar a estas empresas a que cumplan metas voluntarias de producción, consumo responsable y hambre cero.
