Empresas mexicanas del sector alimentario como Bimbo, Gruma y Herdez ya están recibiendo impactos negativos en el precio de sus materias primas.
En una semana, Bimbo redujo en 5.51% su valor accionario, lo que representa una pérdida de 15,439 millones de pesos. Apenas, el 23 de febrero pasado suspendió las operaciones de su planta en Dnipro, la cuarta ciudad más poblada de Ucrania.
Gruma, la mayor fabricante de harina de maíz y tortillas, observa una caída de 7.59% desde el inicio de las hostilidades. Esto representa una pérdida en valor de 7,902 millones de pesos. Al igual que Bimbo tuvo que cerrar su planta en Cherkasy, a 160 kilómetros de Kiev, la capital ucraniana.
Herdez, por su parte, ya perdió 1,320 millones de pesos en valor de mercado y registró un descenso de 12.29% en su cotización bursátil.
En un artículo publicado por el diario El Economista, Carlos González, director de Análisis Económico de Grupo Financiero Monex, destacó que ya había presiones inflacionarias previas al conflicto armado. Tan solo el maíz ha tenido un incremento de 35.75% en el último año. “Las empresas tendrán que absorber el incremento en el precio de las materias primas, y aunque en algunos casos hay coberturas para los precios, en otros casos también se ven incrementos en los productos que llegan al consumidor final. Se verá un impacto en los costos principalmente por los combustibles y granos”, afirmó el especialista.